El Globo Santacruceño vuela al Nacional

Este domingo en el Polideportivo Lucas Moussou de la ciudad de Río Turbio, el Club Atlético Huracán Santacruceño se consagró campeón en la rama femenina del Torneo Regional Patagónico de Clubes, tras derrotar en la tanda de penales al Club Talleres, dueño de casa.

RIO TURBIO (Enviado Especial -Lien Tapia-).- Cuatro días empapados de futsal se vivieron en la capital del carbón. Allá al oeste de la Patagonia cuatro clubes de la isla fueguina acudieron para protagonizar el Torneo Regional Patagónico que tenía como campeón defensor a ADEFU de Río Grande. Justamente el naranja y Celeste FC lo hicieron por el norte de la isla sumado a Lasserre y Escuela Municipal de la capital. Pero el campeón, el grito sagrado, lo dio el Globo de Río Gallegos.

Las nevadas colinas en tierra de mineros recibieron el día miércoles a las delegaciones para ya el jueves empezar con la ardiente y exigente competencia. Lasserre y Escuela de Ushuaia compartieron el Grupo A, pero sin éxito. Es que el Flúo producto de tres preocupantes derrotas quedó fuera de toda posibilidad y Escuela Municipal, que no logró desplegar su mejor futsal, también se quedó en las puertas de las semifinales.

Diferente suerte para los elencos del norte de la isla. Celeste FC fue el mejor del Grupo B y ADEFU su escolta metiéndose en las llaves decisivas del día sábado por la noche.

Ahí en la cita a duelo directo las dirigidas por Mauro Fuertes protagonizaron uno de los mejores espectáculos de todo el campeonato, comandadas por el talento de Taty Ruiz, el rol de liderazgo de Arias y el picante de Méndez, Rain y Rodríguez, el naranja riograndense que perdía 2-0 frente al local Talleres logró ponerse 2-2 y hacer figura en varias ocasiones a la arquera local.

Pero la suerte, el azar y el destino, vaya uno a saber, no estuvieron del lado de ADEFU, a falta de muy poco para que el tablero electrónico marcara el cierre del partido apareció Brenda Gaitán, la capitana del conjunto anfitrión, para clavar un furibundo remate de derecha al ángulo que sin éxito intento contener Vukasovic. Fue derrota del campeón riograndense y vuelta a casa.

A continuación la situación no mejoró para los equipos de la isla, ya que el Celeste tenía cita puntual a las 22:00 para enfrentar a Huracán de la capital de Santa Cruz. Sonó el silbato y las fichas empezaron a moverse en la 40×20. El duelo inició parejo, como suelen iniciar estas instancias, pero pegó primero Huracán, y no una, sino dos veces.

Después tres, después cuatro y el conjunto de Río Gallegos, lejos de parecer un globo en una tormenta, parecía una tormenta que agitaba y sometía cada vez con mayor agresividad el arco de la siempre sólida Montaña. A esta, sumarle también que todos los intentos de Celeste por recortar la distancia, que fueron muchos, chocaban contra la, sin dudas, mejor arquera del torneo, Wholver. Fue victoria aplastante 8-1 para las de Santa Cruz y boleto directo a la última función.

La definición

Domingo, 14:00. De un lado Talleres, del otro Huracán. Un solo objetivo, el título patagónico, naturalmente. El encuentro fue hermético de a ratos, dramático en otros tantos e infartante también. Chivo, duro, físico, lento, de piernas pesadas que arrastraban cuatro días de ardua competencia.

Intentó primero el dueño de casa desde los pies de Macarena Maza y Vargas, respondió Noelia Chávez para el Globo y después Del Castillo, pero no había caso, se moría la primera mitad en cero, se moría, salvó que alguna cometiera un error fatal y claro, este escenario sucedió. A la salida de un saque de arco, Brenda Gaitán, jugadora de Talleres, equivocó un pase hacia adentro con tanta mala fortuna que la caprichosa cayó mansa en los pies de la goleadora del torneo: Belén Ulloa y esta goleadora, como acabamos de decir, no perdonó. Hasta ahí 1-0 y al descanso.

La segunda mitad fue mucho más dramática, más histérica, la bola fue de un lado al otro casi sin juego asociado. Llegó al empate la “T” por Páez y estalló el polideportivo. La igualdad parcial afeó, si se nos permite el término, el encuentro por algunos minutos. Minutos tras los cuales tomó el útil otra de las mejores del torneo: Sabrina Carrión, que recortó de derecha hacia adentro y al perfilarse de zurda y desde casi veinte metros la mandó a guardar al ángulo, 2-1 para el local y delirio del público.

Pero la suerte o el premio a insistir, la recompensa, digamos, estaba guardada para un nombre, uno que la tierra de Ushuaia conoce muy bien: Noelia Chávez, quien durante tantos años defendió por ejemplo los colores de Mercantil o CAMPOLTER, tomó la bocha en un córner izquierdo cuando al partido le quedaban doce segundos y, plena de fe, la mando a guardar para la locura total y el silencio en el Moussou.

Fue empate, justo empate, porque el futsal tiene a veces esta cuestión ligada a la justicia, salvo que en esta oportunidad debía sí o sí haber un ganador y para eso los penales de las que tantas veces hablamos. Ahí la mueca de la fortuna le sonrió al Globo, se llevó el título patagónico al derrotar en la tanda del punto fatídico 5-4 al dueño de casa. Huracán, Huracán Santacruceño es el campeón regional patagónico del Futsal Femenino.

Será momento para los elencos fueguinos de volver a mirar lo doméstico para otra vez luchar por competir afuera, para otra vez renovar la ilusión, la ilusión que nunca perdió Chávez, la ilusión que nunca perdió Wholver, la que nunca perdió el Globo. Y se llevó el premio, el que todos buscaban, a casa…

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