El Turismo de Estancia es una maravillosa opción para disfrutar de la vida al aire libre, en contacto con la naturaleza y las tradiciones argentinas. En los alrededores de Mar del Plata existen varios establecimientos que le permiten: hospedarse en antiguos cascos de estilo colonial, observar la faena de los gauchos argentinos, saborear los mejores vinos argentinos, quesos, fiambres y panes caseros, disfrutar de caminatas o cabalgatas, presenciar espectáculos folklóricos de danza y música, observar las tareas rurales de la doma, la yerra, el arreo y otras tradiciones del campo argentino.
Mar del Plata no es ajena a los deseos de quienes llegan buscando un auténtico descanso y le abre las puertas al campo invitándolo a conocer los establecimientos rurales del sudeste de la Provincia de Buenos Aires. Ubicados a no más de 30 minutos del centro de la ciudad, de sus playas y con el respaldo de su equipamiento turístico, le permite disfrutar del campo en excursiones y paseos de medio día o día completo. La naturaleza, la cultura , la historia y las tradiciones se conjugan para que goce de unas vacaciones con el sabor genuino del campo.
Muy cerca del dinamismo de la ciudad, es posible alojarse o pasar un placentero día de campo en antiguos cascos de estancias de estilo colonial o pintoresquista de mediados del siglo XIX o principios del siglo XX. Enmarcadas en la pampa auténtica , en un paisaje quebrado, rodeadas de bosques y añosas arboledas, y siempre recostadas en el sistema serrano de Tandilia, estos establecimientos con su mobiliario original o reciclados están preparados para recibir visitantes todo el año. La explotación agropecuaria, los tambos, la cría de caballos, el cultivo de frutas , cereales y hortalizas; son algunas de las actividades que las familias rurales comparten con el turista. El campo se vive a pleno con entretenidos paseos en sulky, caminatas por los bosques de talas y curros, observando flora, aves y realizando cabalgatas a orillas del mar, por sierras, lomadas y arroyos.
Piscinas y canchas deportivas permiten gozar del aire puro y emocionantes partidos de pato y polo.
El asado al asador acompañado por verduras frescas son un clásico en los almuerzos campestres. Celebrar acontecimientos sociales y de negocios en una estancia constituye otra posibilidad, en salones de grandes dimensiones y con el equipamiento técnico apropiado.
Entre los establecimientos rurales educativos que podemos visitar se encuentran:
Campo del Mar, a 11 km de la Rotonda El Faro.
Casa del Mar, Villa García Uriburu, Barrio Parque Camet.
Parque El Encanto, circuito de las Canteras km 2.5.
Podemos elegir entre las estancias:
La Trinidad, Santa Isabel, El Casa, La Calandria, Utuzaingó y «La Reserva» estancia donde se fabrica dulce de leche.
Además, la Ciudad Feliz ofrece granjas, quintas y fincas para disfrutar una placentera estadía a puro campo.