María Fernanda Reyes,
directora General de Proyectos de Niñez, Adolescencia y Juventud de
ANSES, dijo que la AUH “es un derecho y no un plan” y que “el
número de madres adolescentes disminuyó en vez de aumentar”. Lo
hizo durante el seminario internacional en que se abordó el tema.
BUENOS AIRES.- El viernes, con la presencia de la ministra de Salud y Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley y del director Ejecutivo de ANSES, Emilio Basavilbaso, el viernes concluyó el seminario internacional Asignación Universal por Hijo: presente y futuro del derecho en la niñez.
El objetivo de este encuentro internacional fue elaborar propuestas y discutir sobre los alcances de la protección social de los niños y adolescentes en la Argentina y el mundo.
María Fernanda Reyes, directora General de Proyectos de Niñez, Adolescencia y Juventud de ANSES, presentó ciertos estigmas que es necesario erradicar. En ese sentido expresó que “tenemos que derribar mitos que se generaron en torno a la Asignación Universal desde el mismo comienzo, hace 10 años, ya que son erróneos y estigmatizan”.
Aseguró que la AUH “es un derecho y no un plan, no es arbitraria y no hay intermediarios. El número de madres adolescentes disminuyó en vez de aumentar, tal como afirman algunos. Las familias incluidas en los sistemas formales de empleo que perciben asignaciones familiares así como las que cobran Asignación Universal tienen la misma cantidad de hijos y solo el 2,2% llega a tener 5 hijos”
Y agregó que “comprobamos que quienes no presentan la Libreta de todas formas envían a sus hijos al colegio y les realizan controles de salud. Otro de los mitos muy repetidos es que supuestamente los beneficiarios de la AUH son ‘vagos’ y no quieren trabajar. Sin embargo, el 49,8% están ocupados en el sector informal, dado que la necesidad de trabajar no es solo económica sino también emocional”.
Aseguró que “otra falacia que comprobamos es que quienes cobran la Asignación se gastan esa plata en drogas y juego. Pero en la realidad les permite a las familias planificar la comprar de ropa, zapatillas y alimentos”.
Reyes concluyó su exposición diciendo que “la estigmatización es la forma más común de violencia usada en sociedades democráticas, estamos ante un gran desafío y por eso abogamos por un ingreso universal a la niñez y que el Estado esté presente para que todos tengamos las mismas oportunidades”.
Desafíos y conclusiones
-Universalidad: En los últimos 2 años y medio se lograron muchos avances. ANSES incluyó a casi 1,5 millones de chicos al sistema de Asignaciones Familiares y Asignación Universal por Hijo (AUH); también incorporó a los hijos de monotributistas y trabajadores de temporada y realizó operativos en todo el país para buscar proactivamente a aquellos niños que estaban sin cobertura. Gracias a estas acciones, este año ANSES alcanzó una cobertura máxima de 9,1 millones de niños. Aun así, el desafío es incorporar a los 460.000 niños que faltan.
-Condicionalidad: la transferencia de dinero está condicionada a la presentación de la Libreta.
-Automatización: ANSES evalúa compensar la falta de información de algunas familias con datos de otros ministerios. El gran cambio después de 10 años es que el organismo está automatizando el proceso. Se estima que en los próximos meses el 50% de los beneficiarios tendrán cargada la información automáticamente por parte del Gobierno. A través del sistema de Ventanilla Única, por ejemplo, los padres podrán enviar una foto sacada con el celular de los documentos que deben presentar.
El cierre del encuentro estuvo a cargo del director del Banco Mundial en la Argentina, Paraguay y Uruguay, Jesko Hentschel, y de la Representante Unicef Argentina, Ana de Mendoza Barberá.