Cancillería ratificó el reclamo

BUENOS AIRES (NA).- El gobierno argentino ratificó ayer su “compromiso” de “no bajar la bandera de soberanía” sobre las islas Malvinas, de “no volver a derramar sangre” y “perseverar” en el “justo reclamo” ante el Reino Unido mediante el diálogo.

Izamiento del pabellón nacional ubicado en la Plaza de Armas, frente a la sede del Ministerio de Defensa (Foto NA).

“El 2 de abril debe ser un día de recuerdo y homenaje”, afirmó hoy la cancillería argentina a través de un comunicado donde también remarca que es una jornada de “compromiso”.
El compromiso a “no bajar nunca la bandera de soberanía por la que pelearon nuestros jóvenes, de no volver a derramar sangre por este justo reclamo y de perseverar en el camino del diálogo con el Reino Unido atendiendo, según establecen las Naciones Unidas, los intereses de los isleños”.
En ese contexto, se reafirmó “el mandato constitucional de recuperar, siempre a través del diálogo y la diplomacia, la arrebatada soberanía argentina sobre las Malvinas”.
“La Nación Argentina ratifica su imprescriptible soberanía sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur y los espacios marinos e insulares (…) La recuperación de dichos territorios y el ejercicio pleno de la soberanía respetando el modo de vida de sus habitantes y conforme a los principios del Derecho Internacional, constituyen un objetivo permanente e irrenunciable del pueblo argentino”.
“Cada 2 de abril, los argentinos y las argentinas hacemos un alto en nuestras tareas para recordar y homenajear a nuestros compatriotas que dieron la vida defendiendo valientemente la soberanía sobre las islas Malvinas”, expresó la cancillería.
También, destacó el homenaje a todos “aquellos que combatieron y llevan sobre sus cuerpos y sus mentes las indelebles huellas del conflicto armado”.
Asimismo, se indicó que “la deuda que Argentina tiene con los caídos, los veteranos y sus familias será para siempre y debemos seguir honrándola a través de la memoria”, más allá de “la capacidad del Estado para reconocer en términos concretos sus necesidades y atenderlas.
“Sin lugar a dudas, uno de los principales caminos para demostrar el reconocimiento a su lucha es seguir peleando por los ideales por los cuales combatieron y murieron”, aclaró el parte emitido por la cancillería a cargo de Felipe Solá.