RIO GRANDE.- En los últimos años tuvieron un aumento significativo los partos por cesárea, tanto en la ciudad de Río Grande como en todo el país; así como también en América Latina que, según las cifras de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), cuarenta de cada cien partos es por cesárea. Se trata de un porcentaje que casi cuatriplica el ideal de entre diez y quince de cada cien, considerado por expertos de todo el mundo y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En tanto, en Argentina, la tasa de cesáreas se ubica en un promedio del 30,8 % de los partos registrados entre 2010 y 2014, de acuerdo con datos preliminares del Segundo Informe Nacional de Relevamiento Epidemiológico SIP-Gestión, tal es así que este año, en un encuentro internacional de la OPS que se realizó en Buenos Aires, se definió a las cesáreas como una “epidemia”; el evento fue realizado en el marco de la Semana Mundial del Parto Respetado, que busca garantizar derechos de las mujeres y sus bebés.
La cesárea:
«Es una de las operaciones quirúrgicas más frecuentes del mundo, con tasas que siguen subiendo» aseguran los especialistas médicos; «aunque puede salvar vidas, la cesárea a menudo se realiza sin necesidad médica, poniendo a las mujeres y a sus bebés en riesgo de problemas de salud a corto y a largo plazo». Una nueva declaración de la OMS recalca la importancia de enfocarse en las necesidades de cada paciente y desalienta centrar la atención en intentar alcanzar una tasa determinada.
Cabe mencionar que «la cesárea puede ser necesaria cuando el parto vaginal entrañe un riesgo para la madre o el bebé, por ejemplo debido a trabajo de parto prolongado, sufrimiento fetal o porque el bebé está en una posición anormal».
Los médicos ginecólogos y obstetras sostienen que «el parto es un proceso natural y maravilloso, del que muchas mujeres están huyendo por miedo a sentir dolor o a que se les dañe la vagina. Desde el punto de vista funcional, la cesárea es un elemento salvador, ya que por razones médicas puede proteger la vida de la madre y del bebé».
Parto natural
La madre comienza a sentir las contracciones uterinas regulares que aumentan con intensidad y frecuencia, se dilata el cuello uterino por donde desciende el bebé y luego baja por la vagina. «En algunos casos requiere episiotomía (corte vaginal) para hacer más fácil la salida del bebé. La herida genera dolor, pero solo requiere de baño diario para sanar rápidamente» confían los especialistas.
El parto natural es la forma prevista para el nacimiento de los seres humanos; es una función del cuerpo de la mujer que se da por procesos naturales y no por la intervención del médico. El cuerpo hace lo necesario desde el punto de vista hormonal y mecánico para el nacimiento del bebé.
Lo cierto es que si bien la madre puede elegir si tener un parto natural o cesárea, lo ideal es consultar y despejar dudas con su médico de cabecera acerca de los pro y los contra, tanto del parto natural como de la cesárea.