El Tribunal de Juicio condenó a 10 años de prisión a un hombre que abusó de su hija

Este miércoles finalizó el juicio contra un hombre acusado de abusar sexualmente de su hija biológica. Los integrantes del Tribunal Oral resolvieron condenarlo a la pena de 10 años de prisión por el delito de “Abuso sexual con acceso carnal agravado”. La Fiscal se mostró conforme con la pena, ya que fue lo solicitado durante los alegatos. En sus últimas palabras el imputado aseguró que nunca abusó de su hija, por lo que no hubo muestras de arrepentimiento.
RIO GRANDE.- Minutos antes del mediodía de ayer finalizó el juicio oral y no público contra un hombre acusado de haber cometido hechos de abuso a su hija biológica de 11 años.

El hecho habría ocurrido entre el pasado 28 de enero y el 8 de mayo de 2016 en una precaria vivienda de la zona de la Margen Sur, donde vivían padre e hija solos.

La jornada final del juicio comenzó con las últimas palabras del acusado, quien si bien no mostró arrepentimiento del hecho, aseguró que en ningún momento abusó de su hija y que desde su llegada a la isla se dedicó a trabajar para comprar cosas y salir adelante como familia.

Una vez finalizado, los magistrados Juan José Varela, Daniel Borrone y Martín Bramati, tras una deliberación, resolvieron condenar al imputado a la pena de 10 años de prisión efectiva por el delito de “Abuso sexual con acceso carnal agravado” en perjuicio de su hija biológica, la cual presenta un retraso madurativo.

Finalmente, se informó que la lectura completa de la sentencia se realizará el miércoles 05 de abril a partir de las 13:00 en las oficinas del Tribunal de Juicio.
Conforme

Una vez finalizado el juicio, la fiscal Verónica Marchisio se mostró conforme con la pena, ya que fue la misma cantidad de años solicitada durante los alegatos el pasado lunes.

Asimismo, aclaró que si bien la condena corresponde al pedido efectuado, “quedar conformes es una forma de decir, porque ahora comienza una nueva etapa en la víctima y se deberá trabajar arduamente por el bienestar de ella”.

El defensor oficial Mariano Sardi junto al condenado, cuya identidad se mantiene bajo reserva por una orden judicial.