Tras la reparación en la rotura del caño maestro, en la Planta Potabilizadora El Tropezón, el suministro de agua potable a la población se hizo en forma paulatina y hasta anoche aún quedaban algunos sectores con la restricción en ese servicio.
RIO GRANDE.- No fue automática la solución en el suministro de agua potable a los domicilios, luego de superada la rotura de un caño maestro de la planta El Tropezón. Paulatinamente la gente comenzó a ver regularizado el servicio, pero hubo zonas donde la restricción continuaba.
Las quejas de los vecinos se multiplicaron ayer, porque se consideraba que la noche del lunes el problema quedaba subsanado. Sin embargo, en muchos barrios no fue así y el Municipio fue nuevamente banco de fuertes críticas por un servicio que sigue teniendo falencias, sobre todo por la demorada ampliación de la planta El Tropezón.
Reconocimiento
En medio de las críticas al Municipio, el intendente Gustavo Melella difundió un agradecimiento al personal de Obras Sanitarias que trabajó durante todo el lunes para resolver la crisis planteada, a raíz del hecho infortunado de la rotura de una cañería, algo que fue un accidente imprevisible y que obligó a dejar de bombear agua a la red domiciliaria.
En un comunicado difundido ayer, muy temprano, el intendente Gustavo Melella, hizo “público el agradecimiento a todo el personal de Obras Sanitarias por el esfuerzo puesto en los trabajos realizados durante el día lunes a razón de la rotura del caño maestro de la Planta Potabilizadora ‘El Tropezón’, lo cual dejó sin el servicio vital a toda la comunidad”.
“Por esta razón, el reconocimiento a aquellos que trabajaron contrarreloj para solucionar tan importante situación, siendo ellos ejemplo claro de lo que implica ser un servidor público al servicio de todos los vecinos”, indica el comunicado.
Finalmente “hace extensivo el agradecimiento a la empresa privada que colaboró en la reparación y trabajó codo a codo con todo el personal municipal”.
