Somen Debnath, de la India al mundo en bicicleta

A  los 14 años, Somen tomó contacto con el tema VIH/SIDA, y su vida cambió. Decidió que iba a hacer su mayor esfuerzo por concientizar, prevenir, educar y difundir el tema en todo el mundo. Hoy, lleva más de 100 países recorridos en esta campaña, y espera terminar un itinerario de 190 países en total para el 2020.

 

RÍO GRANDE.- Somen Debnath nació en la India, en una de las regiones que se considera la mayor reserva de tigres de Bengala del planeta. Apenas dos días después de recibir su título universitario, empezó recorrer el mundo en bicicleta, trabajando por la concientización sobre el VIH/SIDA y la difusión de la cultura hindú.

“Este viaje, es una misión para concientizar acerca del VIH, y también para difundir la cultura hindú alrededor del mundo, así que también es un programa de intercambio cultural”, comentó Somen.

Y enumeró cada uno de los lugares que conoció: “Desde 2004 a 2006 viajé por toda la India, después viajé por toda Asia hasta el 2009, visitando 24 países. Del 2009 al 2012 visité cerca de 45 países en Europa, Polo Norte y Groenlandia. Después del 2012, y hasta el año pasado estuve recorriendo 52 países de África, incluyendo 10 países en Medio Oriente. Así que terminé mis viajes en esos países y después vine de África hacia América. Tomé un avión de Dakar en Senegal a Brasil, en Belem”.

Uno de sus sueños, desde que pequeño, era conocer Brasil, específicamente la Selva Amazónica, impresionado por la belleza y la diversidad natural de la región, y es una de las cosas que más atesora de su viaje: “Viajé por el amazonas, durante dos meses y me tomé mi tiempo ahí, porque recorrer el Amazonas era el sueño de mi infancia, desde que tenía 12 años de edad, porque es el lugar más hermoso de Sudamérica, y amo la naturaleza, además soy biólogo, tengo un título universitario en Zoología”, explica.

Su filosofía desde esa temprana edad es simple ‘La vida es muy corta, así que viví el doble’, él resalta esta idea: “Cuando vos vivís tu vida el doble, no vas a tener nada que pedirle a la vida. Vas a satisfacer completamente todos tus requisitos, exactamente lo que querés de la vida. Y esta ha sido mi filosofía desde pequeño. Yo decidí vivir el doble”.

 

Creando conciencia

También desde muy joven, Somen Debnath, tomó contacto con el tema VIH/SIDA. Una vez que supo del tema, su vida no fue igual.

“Cuando yo tenía 14 años leí un artículo en el diario acerca de una persona que había muerto de VIH-SIDA. Leí en el artículo la afirmación que decía ‘el SIDA es más mortal que el cáncer’. Yo sabía entonces que cáncer era la enfermedad más difícil de curar. Pero era mi primer encuentro con el SIDA como concepto. Cuando acudí a mis profesores de la escuela, ellos no fueron capaces de explicarme más sobre el tema. Fue ahí que hice un compromiso personal: que cuando yo supiera más acerca del VIH-SIDA iba a volver y enseñarles a esos profesores que no fueron capaces de darme el conocimiento en su momento”, recuerda Somen.

A los 16 años, recibió instrucción y entrenamiento específicos sobre VIH/SIDA en la Sociedad de Control de SIDA del estado de Bengala Occidental. Y empezó una campaña de prevención y concientización en su propia escuela. El camino había empezado para él, desde su escuela, siguió a su barrio, luego a su ciudad, su provincia, su país, y en 2004, el mundo.

“De los 16 a los 20 años, estuve trabajando para mi provincia. A los 20 extendí mi campaña a mi país, y a los 22 dejé mi país y estuve trabajando para el resto del mundo. Tengo más de 10 mil amigos en todo el mundo que viven con VIH/SIDA. Conocí muchos tipos diferentes de personas, y amigos”, reconoce el viajero.

 

Diferentes países y situaciones

Al hablar de información, educación, y campañas de concientización Somen asegura que la situación respecto al VIH en cada país es muy diferente. “En algunos países hay muchos estigmas que no pueden quitarse; mayormente en regiones musulmanas existe este tipo de problema. No son muy comunicativos, y el VIH es un tema de comunicación. Pero ahí, por ejemplo, si vos tenés VIH o SIDA, no podés ni explicar que tenés esta condición, no podés hablar prácticamente. Así que esos estigmas de la gente llevan a otros problemas -explica Somen-. En Europa, encontré que la gente tiene mucho acceso a hospitales, pueden conseguir los medicamentos a través de Internet, hay igualdad entre las personas que padecen del VIH y los que no. Cosas como poder usar las mismas instalaciones sanitarias, las mismas habitaciones, oficinas. La enfermedad no afecta las interacciones sociales, y también tienen mucha conciencia social. Hay tanto acceso, y comunicación que cada país trabajan diferentes maneras en la difusión y concientización”.

Una de las cosas que más destaca Somen, es el nivel de compromiso que pudo observar en la clase política mientras recorría la región. “Fue una gran oportunidad para mí, conocí más de 18 ministros de salud, que me dieron acceso a varios hospitales en los que pude ver cómo trabajan, como difunden y educan a la gente; pude trabajar con ellos, y ver como están trabajando sobre el VIH SIDA”.

 

Prevención en Argentina

Respecto a los lugares que visitó en Argentina observó: “La verdad, debo decir que el gobierno está haciendo un buen trabajo. Acá mismo, la Municipalidad, está muy favor de la concientización local. El intendente, tiene un área de Salud, que toma diferentes iniciativas, en distintos sectores”.

Sin embargo, después de 12 años de recorrido internacional, Somen pudo encontrar también algunas falencias en el acceso a la información y medidas preventivas: “Se ve que las grandes ciudades están más involucradas que en los pequeños poblados en este tipo de actividad. También, veo una dificultad, y es que debido a que la comunidad aquí tiene una mentalidad muy cristiana, más ahora que el Papa es argentino, hay lugares en los que el acceso a los preservativos no es muy bueno”.

Somen asegura que en lugares como la India, Botsuana, era usual que las personas sintieran culpa, al tener que comprar preservativos. Mientras que en países de Europa por ejemplo, sólo con ir a una estación de servicio, podía encontrarse un dispensador y tener preservativos de fácil acceso

Los más afectados por esta situación particular con los jóvenes, cuando comienzan a involucrarse sexualmente. En situaciones que incluyen el consumo de alcohol, y tienen relaciones sexuales de forma desprevenida.

“En las escuelas -remarca Somen- todos los jóvenes son muy abiertos a conversar sobre el tema, pero las chicas son más honestas que los muchachos. Y en la mayor parte, las mayores dificultades se les presentan a las chicas. Por ejemplo, cuando estamos teniendo charlas grupales, las chicas plantean ‘a mí me gusta un muchacho, pero no sé si está siendo honesto conmigo o no, así que si quiero tener relaciones con él, qué debería hacer, donde puedo yo tener fácil acceso a preservativos’. Yo me siento muy cómodo hablando con estudiantes, porque ellos se sienten cómodos hablando conmigo, y así encontramos cuáles son las dificultades de las campañas de concientización”.

 

Hay una solución

En su viaje, Somen conoció y habló con todo tipo de personas. Puedo vivir en una casa, con unas 500 personas HIV positivo, y sin tener asegura ningún tipo de problemas. “Es más, me sentí honrado entre ellos. Porque a pesar de las diferencias, encontramos igualdad, el sentimiento que la debida conciencia del tema puede dar”, comentó.

Él asegura que falta poco tiempo, para que la ciencia pueda encontrar una cura definitiva a este mal. Sin embargo, mientras eso sucede, el mensaje que Somen quiere transmitir es acerca de lo que se puede hacer hoy mismo: “La medicación disponible en esta época, permite que una persona que es HIV positivo, pueda vivir unos 20 o 30 más, sin tener mayores dificultades. Se puede trabajar, se puede vivir. Pero hay dos problemas que acosan a los portadores del virus, uno es la ansiedad, y el otro es el estrés. Y esto es lo que puede desmoronar a una persona. Es ahí donde dejan de comer, o se saltean sus medicamentos y controles. Pero, si una persona que portadora de VIH puede comer bien, trabajar bien, tener buenos amigos y estar rodeado de buenas personas; por supuesto que va a seguir teniendo problemas como todo el mundo, pero estos problemas no van a poder calar profundamente y llevarlo a una depresión”, aseguró.

Y concluyó con un pedido a toda la comunidad: “Por favor, no aíslen a las personas que tienen HIV, denles un lugar, ellos pueden ayudarnos a construir un mundo mejor. Y lo segundo, por favor, sean cuidadosos, los propios portadores, sean cuidadosos, ustedes pueden empezar y hacer que nuestra sociedad termine con esta ola de contagios del VIH”.

Para conocer más acerca del programa de Concientización, o realizar donaciones, se puede ingresar al sitio web www.somen2020world.com o la página de Facebook www.facebook.com/worldsomen.

Somen Debnath, recorre el mundo desde 2004 creando conciencia sobre el VIH/SIDA.