Sin inversión no hay educación

La entidad sindical UDA emitió un comunicado en donde plasma la preocupación por la falta de inversión en educación. De acuerdo a estudios realizados por los Equipos Técnicos de la Unión Docentes Argentinos (UDA), si la pandemia permitiese el dictado de clases presenciales, al inicio del ciclo lectivo del año 2021 entre un 35% y 40% de alumnos (o sea más 3 millones y medio de alumnos) se encontrarán en situación de deserción o abandono escolar.

Es preocupante la situación de la educación en todo el país.

BUENOS AIRES.- Las causales son variadas, pero mayoritariamente tienen que ver con falta de inversión. Falta o deficiente conectividad, carencia de equipos tecnológicos adecuados, familias en estado de desocupación laboral. El estado crítico de la infraestructura escolar es otro ejemplo de desinversión.

Al referirse a las necesidades tecnológicas, desde UDA señalan el ejemplo de la provincia de Misiones, con una numerosa cantidad de escuelas y cientos de alumnos y docentes que no cuentan con acceso a agua potable: de acuerdo a información oficial sólo conectar estas escuelas a la red de agua potable tiene un costo de 100 millones de pesos. Esta situación se repite en otras zonas del país.

Escuelas, en distintas provincias sin sanitarios (funcionan con letrinas), sin ningún tipo de climatización, espacios extremadamente reducidos, serios problemas eléctricos, con el consiguiente riesgo que esto implica, entre otras situaciones. A nivel salarial el deterioro también se encuentra en situación límite: todos los salarios iniciales docentes del país se encuentran por debajo de la línea de pobreza. Y aún así varias jurisdicciones no abonan salarios en tiempo y forma.

Otros gobiernos provinciales revistan diferentes incumplimientos o no convocan a paritarias, o mantienen salarios del año 2019. En varias provincias las raciones diarias de comidas son inferiores a los 60 pesos. Por ejemplo la provincia de Buenos Aires en el mes de marzo abonaba un monto de 51,90 pesos por alumno, que incluía desayuno y almuerzo. Desde UDA agregaron que la falta de inversión en educación es algo patente, pero no es la pandemia la que indica la urgencia de invertir más, esta necesidad es anterior a la existencia del COVID-19. Hace años que no se cumple con la ley de financiamiento y no se invierte el 6% del PBI en educación.

En ese sentido manifestaron: “Desde la Unión Docentes Argentinos lo venimos proponiendo: hay que aumentar el presupuesto educativo, se debe elevar desde el 6% del PBI, que fija la ley, de manera progresiva para llegar al 10%. De haber existido una mayor presencia del Estado reflejada en inversión estas preocupantes realidades, reflejadas en porcentajes estadísticos, no hubiesen sido tales. Se debió haber invertido más en conectividad, en equipamiento, tanto para alumnos como para docentes, salarios e infraestructura, programas de capacitación”. Más allá de los efectos de la pandemia, tanto la desescolarización como el abandono escolar están profundamente ligados al nivel de inversión. Sin inversión real, suficiente y constante en estos ítems, las consecuencias siempre serán las mismas: mayor desescolarización, mayor desigualdad, mayor injusticia.

Por último, señalaron: “Desde la Unión Docentes Argentinos continuamos sosteniendo y reclamando que se aumente el presupuesto educativo, en el convencimiento que el camino del desarrollo nacional comienza por un sistema educativo sólido, que garantice la equidad y que brinde igualdad de posibilidades a todas y a todos los argentinos y las argentinas”.