Desde que el Jardín Nº 12 abrió sus puertas, en el Bº 25 de noviembre en un espacio cedido por la Escuela Nº 19, acompañamos el nacimiento de esta Institución. Es por ello que recordamos algunas de las vivencias, su primer directora Margarita Hirsig incansable luchadora por lograr lo mejor para sus alumnos.
El primer día de clases no había bandera en el patio, menos aún la de ceremonia y una semana después la bandera fue confeccionada por manos de las docentes, y así fueron logrando a lo largo de los años los elementos para equiparlo, el aporte de los padres que soñaban junto a las docentes el jardín pintado y allí pusieron manos a la obra, el aporte de los padrinos y el deseo de superación llegaron hasta hoy con un edificio propio.
Al cabo de los años algo se mantuvo intacto el espíritu de su nombre, Payasos, Globos y Chupetines que se ve reflejado en la sonrisa, alegría y dulzura de las seños al recibir a los niños en los primeros pasos de su educación.
Pupee, la vice
Al hablar con El Sureño, la vicedirectora del establecimiento, Haidee Dugo quien es conocida con el nombre ‘Pupee’, aseguró que “estos 25 años representan una historia de innumerables sucesos desde los comienzos y de cómo empezó este jardín”.
Recordó que este jardín “empezó con nada, y ver todo lo que se pudo lograr en estos 25 años es realmente emocionante. Nos han tocado momentos lindos y otros difíciles pero siempre se puso en prioridad a los niños y el aprendizaje a través del juego, y de la contención”.
Dijo que “trabajar con un equipo de gente estable es un motivo para que se genere ese sentimiento de pertenencia y las chicas que se incorporan, inmediatamente continúan con el mismo rumbo”.
La directiva remarcó el trabajo de articulación con el que se trabaja en el establecimiento, “la inclusión, los talleres, y las diversas metodologías que hacen que el trabajo final sea excelente”.
Entre otras cosas “se prioriza el placer por el juego, por el conocer y por el hacer y se incorporan formas libres de trabajo que hace que el alumno se sienta feliz lo que, para nosotras, es una prioridad”.
Al rememorar momentos vividos Pupee, no pudo ocultar su profunda emoción al recordar a Bruno quien fue su alumno y, según aseguró, “está siempre presente entre nosotros”.
También destacó y recordó a muchos de los directivos que pasaron por el establecimiento y que dejaron una marca imborrable que se conserva hasta el presente.
Entre otras cosas reconoció que, en estos años, “siempre me sentí respetada y muy cómoda con cada uno de los compañeros de trabajo lo que agradezco de manera infinita”.
Entre diversos los objetivos, destacó el poder cumplir los 25 años en un edificio propio aunque “aún quedan otras cosas por cumplir pero es una situación que nos invita a seguir trabajando pero, en general, me siento muy agradecida y satisfecha por lo logrado”.
Finalmente a docente agradeció la presencia de representantes de otras instituciones quienes participaron de la jornada festiva que se llevó adelante en el Jardín 12.
