Así lo anunció el secretario General de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Carlos Córdoba. En el Congreso de Delegados resolvieron reclamar tanto al gobierno como a los municipios acciones “concretas para controlar los precios”. Buscarán poner un freno a la inflación.
USHUAIA.- Afiliados de ATE realizaron un relevamiento en supermercados de Río Grande, para constatar el estado real de los precios. En esa ciudad los importes son los más baratos de toda la Provincia.
Sin embargo, “la canasta familiar sigue aumentando, y siguen remarcando los precios y nos pone mal”, afirmó el gremialista, cargando contra los dueños de los supermercados que “viven en la Patagonia como nuestras familias. No se dan cuenta de que subir los precios hace que la inflación sea cada vez más grande”, cuestionó.
“Desde el sindicato tenemos que salir rápidamente a pedir un aumento de sueldos”, precisó Córdoba en vistas de las futuras recomposiciones salariales, dado que el objetivo es “darle una solución definitiva; si no los comerciantes se llevan toda nuestra plata”.
Por tal motivo, dio cuenta que desde ATE se le pedirá al Gobierno provincial y a los municipios que “hagan respetar la ley”, ya que no sólo se trata de un “beneficio para los industriales sino para los comerciantes”.
“Queremos que controlen a los comerciantes, y que los comerciantes bajen la pata, se calmen y nos den un poco de respiro”, reclamó el secretario General de la Asociación de Trabajadores del Estado, y pidió que “dejen de llevarse todo y dejen algo para el pueblo de Tierra del Fuego”.
Córdoba acentuó que en la situación que está la Provincia, “necesitamos cuidar al Estado, pero también necesitamos más inspectores en la calle, controlando los precios para que no tengamos que salir a pedir un aumento salarial y poder sostener el salario mínimo en el Estado”.
El dirigente contó además que están evaluando la posibilidad de concretar un encuentro con la gobernadora Rosana Bertone, para realizarle el planteo personalmente.
Y reiteró que si se cumpliera con la ley “no estaríamos pidiendo aumento salarial, si hubiera inspectores de comercio controlando los precios. Esto no sucedería y nos alcanzaría un 15 o un 10 por ciento de aumento”, concluyó.
