El dato más saliente durante
el juicio concluido ayer fue que el fiscal de la causa volvió sobre
sus pasos y pidió penas muy leves para los acusados, de 2 años de
prisión. Pero los jueces del Tribunal consideraron que el robo
agravado por el uso de arma se había configurado y aplicaron penas
de entre 5 años y seis meses a los 7 años de prisión.
USHUAIA.- El Tribunal de Juicio de Ushuaia aplicó ayer duras condenas a los dos jóvenes que estaban siendo juzgados por haber atacado a otro joven a cuchilladas y luego haber huido con el teléfono celular de la víctima.
Lo llamativo del día fue la solicitud del fiscal, Fernando Ballester Bidau, que llevó a juicio a ambos jóvenes por el delito de robo doblemente agravado, que constituía una pena mínima de 5 años, pero que ayer en su alegato, consideró una acción mucho más atenuada. Tal es así que terminó solicitando penas de 2 años de prisión de cumplimiento en suspenso.
Los jueces Maximiliano García Arpón, Alejandro Pagano Zavalia y Rodolfo Bembihy Videla, condenaron a Fabián Matías Veliz de 34 años a la pena de 7 años de prisión por el delito de robo agravado. En tanto que aplicaron una pena de 5 años y seis meses de prisión a Jorge Matías Alamos de 27 años, cómplice, por el delito de lesiones leves en concurso real con robo agravado.
En tanto, al taxista Guillermo Pablo Benítez Caffe, de 28 años de edad, el Tribunal coincidió con lo pedido por el fiscal Fernando Ballester Bidau y lo absolvió de culpa y cargo, ordenando que cesen todas las medidas judiciales establecidas en su conducta y la devolución inmediata del vehículo que le fue secuestrado el pasado 20 de marzo, cuando sucedió el hecho que fue llevado a juicio.
En el caso de Fabián Matías Veliz de 34 años de edad deberá estar en la cárcel durante 11 años, por tener que cumplir una condena unificada de 5 años y 5 meses de prisión que había quedado firme el 3 de septiembre de 2015, por una causa de drogas; y la aplicada en este nuevo proceso, en la que el Tribunal le impuso 7 años de prisión por el delito de robo doblemente agravado por el uso de arma y la participación de un menor de edad. Los jueces lo consideraron reincidente.
En tanto Jorge Matías Arcos Álamo, de 27 años de edad, tendrá que estar en prisión durante 7 años, ya que a la pena que se le impuso en este juicio, de 5 años y seis meses de prisión, por el delito de lesiones leves, amenazas y robo agravado por uso de arma; se le suma una anterior condena de 3 años en suspenso, la cual había quedado firme el 28 de agosto de 2017.
Cabe indicar que en el caso de Véliz, estaba gozando de libertad condicional que le fue concedida el pasado 23 de junio de 2017; mientras purgaba una condena por el delito de infracción a la ley de estupefacientes. Respecto a Arcos Álamo, estaba libre porque se le había aplicado una condena de prisión en suspenso, la cual había quedado firme el 28 de agosto de 2017.
Un caso violento
En el juicio, se ventiló el caso ocurrido el 20 de marzo pasado, cuando los tres imputados, en compañía de una menor de edad “previo acuerdo de voluntades y división de tareas, se apoderaron ilegítimamente, con violencia física en las personas y el uso de armas blancas, del teléfono celular de Jeremías Pérez”.
La víctima Pérez y un amigo de él, Sebastián Hugo Márquez, debían encontrarse con la menor de edad en la intersección de Tolhuin y Carlos Gardel. Al llegar a esa dirección, observaron a la joven a bordo de un vehículo de alquiler, que estaba siendo conducido por Benítez Caffe. Allí, Pérez intentó abrir la puerta trasera para que bajara la adolescente, a la vez que su amigo le reclamaba a la joven que descendiera del automóvil.
Sin embargo, en ese ínterin, Pérez y Márquez, comenzaron a ser agredidos físicamente por los imputados Veliz y Álamos, por la espalda, con la “empuñadura de un dos cuchillos de grandes dimensiones, en la zona de las cabezas”, describió el Fiscal en su requerimiento.
Luego de un forcejeo entre las partes, Jeremías Pérez, recibió una herida de arma blanca, tras ser golpeado en el piso por los agresores. Arcos Álamos, le sacó el celular de sus prendas de vestir, y a pesar que la víctima se encontraba inmovilizada, continuó agrediéndolo y le clavó el cuchillo en la zona de las costillas, debajo de la axila.
Finalmente, Pérez pudo liberarse de la agresión y se dio a la fuga, al igual que lo hizo Márquez, y ambos se encontraron en el domicilio del segundo, sito en la calle Río Gallegos, desde donde dieron aviso a Emergencias.