Edgardo Esteban recuperó los documentos que le fueron sustraídos durante la guerra de Malvinas. Su cédula de soldado y un rollo de fotografías, entre otros objetos, habían sido subastados en la plataforma de comercio eBay, en Londres, como “trofeos de guerra”. Los mismos habían sido sustraídos hace 40 años cuando fue tomado prisionero y embarcado en el Canberra.
USHUAIA.- La Cancillería entregó ayer a Edgardo Esteban sus documentos personales que habían sido sustraídos durante el conflicto del Atlántico Sur, en un acto presidido por el secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Guillermo Carmona, acompañado por el embajador argentino en el Reino Unido, Javier Figueroa; el abogado Federico Cincotta y la periodista e historiadora Alicia Panero.
Participaron del acto los ministros de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus; Cultura, Tristán Bauer; el secretario de Justicia, Juan Martín Mena, y autoridades nacionales, legisladores, artistas, académicos y funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.
Durante este acto, Carmona agradeció el trabajo realizado para la recuperación de los documentos de Edgardo Esteban, señaló que estos fueron “ilegalmente apropiados” y que “es un antecedente importante” para que suceda lo mismo con otros objetos sustraídos durante el conflicto del Atlántico Sur. Asimismo, destacó la paciencia de Esteban al señalar que “es un ejemplo de persistencia ante la reticencia”.
Por su parte, Edgardo Esteban se mostró emocionado tras recibir sus documentos 40 años después y confesó: “Para mí esto es parte de la historia, parte de mi vida”. Además, destacó el trabajo del estudio de abogados de Cincotta, la investigación de la periodista Panero, y la gestión de las autoridades nacionales a través de la embajada argentina en Reino Unido, mientras que hizo hincapié en el antecedente que marca este hecho, resaltando sin embargo que todavía “hay otras historias que rescatar”.
En julio de 2020, gracias a la advertencia de la historiadora y periodista Alicia Panero, Edgardo Esteban tomó conocimiento que su cédula de soldado y un rollo de fotografías, entre otros objetos, habían sido subastados en la plataforma de comercio web eBay, en Londres, como “trofeos de guerra”. Los mismos habían sido sustraídos hace 40 años cuando fue tomado prisionero y embarcado en el buque británico SS Canberra en 1982, en el final del conflicto del Atlántico Sur.
“Para mí esto es parte de la historia, parte de mi vida”. Además, destacó el trabajo del estudio de abogados de Cincotta, la investigación de la periodista Panero, y la gestión de las autoridades nacionales a través de la embajada argentina en Reino Unido, mientras que hizo hincapié en el antecedente que marca este hecho, resaltando sin embargo que todavía “hay otras historias que rescatar”.Edgardo Esteban
Sus pertenencias fueron adquiridas por un privado y posteriormente vendidas a un coleccionista anónimo. Javier Figueroa, embajador argentino en el Reino Unido, realizó varias gestiones infructuosas ante el comprador reclamando su devolución. Pero ante su continua negativa y por sugerencia del abogado Damián Loretti, el 31 de marzo del 2021 Edgardo presentó en Londres, a través del abogado Federico Cincotta, una denuncia penal ante la Policía Metropolitana londinense contra los tenedores ilegales para intentar recuperar sus pertenencias. Oportunamente, Daniel Filmus y Guillermo Carmona, secretarios de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur de la Cancillería, acompañaron todo este proceso.
El pasado 11 de abril la división antiterrorista de la policía británica hizo entrega a la Embajada argentina en Londres de estos objetos robados. El equipo de investigación del Museo Malvinas trabajará en identificar a los dueños de las fotografías y en restituirlas. Hasta que no se encuentren sus protagonistas, y no sea autorizado por ellos o sus familiares, no se harán públicas.
Un prisionero no puede ser privado de documentos y pertenencias personales por sus captores luego de cesadas las hostilidades. Más allá de la enorme felicidad de Edgardo Esteban por recuperar sus efectos personales, la resolución del caso puede servir como un precedente para casos similares. Aún quedan objetos propiedad de soldados argentinos en manos británicas.